Para dar una nueva vida a esta casa unifamiliar en Vicenza provincia hemos querido recuperar los dos volúmenes que la conformaban, ubicados ambos en la misma parcela. Se trataba por una parte del edificio principal: compuesto por un taller de artesanía en la planta baja y la vivienda en sí en la primera planta, cuyo acceso pasaba por una escala exterior; y por otra parte de un almacén que hacía las veces de depósito de herramientas.
La idea era transformar el cuerpo principal en una sola vivienda unifamiliar privada y destinar el almacén a albergar un generoso garaje y una sala hobbies para la familia: el resultado son dos unidades separadas formalmente pero en estrecho dialogo entre sí, gracias a los grandes ventanales que dan al jardín y enfatizan así la dualidad interior-exterior.
A través del llamado “Piano Casa” (normativa italiana que regula la ampliación máxima aplicable a un edificio tanto en superficie como en volumen), se ha podido modificar la planta baja de la vivienda para obtener una sala de estar de mayor altura y así valorizar el ambiente más importante de la casa, para el cual se han elegido acabados como el pavimento de terrazo veneciano y las vigas de madera descubiertas. Además, el espacio en la planta baja que antes de la reforma cumplía la función de taller se ha transformado no solo en el gran comedor familiar que incluye una cocina con isla y un aseo, sino que alberga también un área semi-independiente con acceso privado que en un futuro podrá ser utilizado como taberna o zona-huéspedes si fuera necesario. La auténtica protagonista del comedor es la escalera de una sola rampa -para así desperdiciar el mínimo espacio posible- que conecta los dos pisos de la casa.
La planta superior alberga la zona de dormitorio, que incluye un baño, dos habitaciones individuales de grandes dimensiones con armarios empotrados, una habitación doble con un baño privado adicional y una amplia lavandería con secadora.